Tras esta apreciación de orden general, llevemos el foco a la Colombia de la esperanza que se ha manifestado en las urnas del pasado domingo. Gustavo Petro y su número dos, la feminista de color, Francia Márquez, encarnan claramente en esa patria hermana, el polo evolutivo cargado de futuro. Llevan consigo la apuesta en favor del respeto a la vida y los derechos humanos en una nación donde ellos han temido innumerables veces por la suya propia, en el que gentes de buena voluntad y comprometidas siguen cayendo abatidos por las fuerzas de la oscuridad con gran impunidad. Representan además la clara apuesta por la justicia y la solidaridad en una geografÃa de abismales diferencias sociales. No lo tienen fácil en la segunda vuelta a celebrar a mediados del próximo Junio. En ella se medirán con el Trump colombiano, como asà se le conoce al multillonario, Rodolfo Hernández, en cuyo preocupante historial no queremos aquÃ, ahora abundar. Los ojos están puestos en Ucrania por la sangrÃa humana que representa esa cruel e injusta guerra, pero la mirada de la esperanza se focaliza clara y nÃtidamente en el nuevo Chile y la nueva Colombia que están naciendo. Gabierl Boric y Gustavo Petro encarnan el despertar de una porción de humanidad que recién sale de la noche y ha decidido ponerse a la vanguardia evolutiva de la humanidad. Uno y otro han marcado distancia con el eje bolivariano (Nicaragua, Venezuela y Cuba), ese sà de izquierda dictatorial, ése clara y palmariamente regresivo e involutivo. Lo que está brotando en los Andes se aviene plenamente con las profecÃas y anuncios superiores que nos hablan del traslado del foco espiritual del planeta de los Himalayas a los Andes. El aspecto polÃtico, aquà sólo esbozado, serÃa un exponente más de este acontecimiento planetario que nos sobrepasa. Abordaremos este tema tan apasionante en un próximo vÃdeo que anunciaré en breve. * En la imagen los candidatos de "Pacto histórico" Gustavo Petro y Francia Márquez Artaza 31 de Mayo de 2022 |
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