No pelearé contra nadie. No pelearé contra los gobernantes que representan un orden con el que no comulgo. La ciudadanÃa los ha puesto ahÃ. Trabajaré para crear otro orden nuevo. Trabajaré en el corazón de mis conciudadanos sugiriendo nuevos horizontes. Trabajaré para que el conjunto de mis hermanos se vean seducidos por otra civilización más justa, más solidaria, más respetuosa con la Naturaleza y sus reinos. Nunca a la contra, ni siquiera del cáncer. Colgar un lazo en la solapa no requiere reto, ni esfuerzo, sà lo demanda sin embargo cambiar los hábitos de vida. Necesitamos menos consigna fácil, menos proclama de salón y más conciencia y responsabilidad en nuestros hábitos diarios. La verdadera salud es más una actitud de vida, que de anuncios de famosos. La ganamos más con la cesta de la compra, en la cocina, en el huerto... que con adhesiones vacÃas de compromisos. Nada llega por causalidad, nada es sin sentido. Si el cáncer llama a nuestra puerta no es sólo para desplegar "in extremis" artillerÃa en su contra, sino para indagar también en lo que desea expresarnos, para reparar en lo que no hacemos adecuadamente. Exploremos el mundo oculto de las causas, no sólo combatamos las evidentes consecuencias. |
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