Decía Miguel Delibes, ”…también a mí me dan miedo las estrellas y todas esas cosas que no se abarcan o no se acaban nunca”. Se cumplen cien años del nacimiento de este escritor directo, sincero, honrado; espejo límpido de nuestro inconsciente colectivo. Levanten anclas, se alcen los pesados lastres del miedo. Naveguemos lo desconocido con la sola brújula del corazón. Fuimos, emergimos de nuevo en importante medida para este momento. Pronto esos miedos serán pasmo y admiración sin límite. Está llegando la revelación más trascendente. Llega la hora en que se dará a conocer la naturaleza y dimensión "de esas cosas que no se acaban nunca", en que tomaremos noción de nuestra ubicación en medio de un universo cuasi infinito. |