La poderosa ola que ayer me derribó en la playa brava fue una clara llamada al deber ya olvidado. Hoy abro esos libros y casi no los reconozco. ¿Cómo les daré continuidad si aún no los siento como mÃos? Tendré que leerlos y releerlos hasta que se me hagan familiares, hasta que vuelva a aceptar la paternidad y consiguiente responsabilidad. ¿Alcanzaré el punto final? ¿Me acompañará este invierno alguno de ellos hasta la imprenta? Antes del verano, cuando la nieve teñÃa de blanco todo el paisaje yo intentaba sembrar luz con el teclado. Ahora busco el zurrón desbordado de letras y semillas, pero estas manos siguen enlazadas a otros hermanos, estos labios sigue cantando las melodÃas del verano. No sé si lograré retornar a la misma historia, a la misma cocina, pero mi corazón quedará eternamente agradecido por el intenso y maravilloso verano (www.foroespiritual.org y www.aroa.eus) recién concluido. Tren para casa, 14 de Septiembre de 2022 * En la imagen "Peregrinea 2022. Comunión que camina". Subida al Monasterio de Oseira desde Cea. Tramo del extenso robledal. --------------------- SILENTE LITERATURA La literatura es, reina en el interior, no necesariamente se "hace". La literatura es una forma de estar en el mundo, de observarlo, de reflexionarlo; es una invitación al alma a contemplar e interpretar los dÃas. A veces encarna en el papel o la pantalla, otras no se toma la molestia, bulle dentro sin plasmación alguna. Con nuestra vida ya escribimos libros a veces mudos que sin embargo podemos leer y releer para extraerles hasta la última gota de aprendizaje.. A veces otros libros de papel van escalando en la mesilla sin nadie que los abra. A veces sobran otros renglones, tu propia narrativa y la de quienes te rodean ya es suficiente. Otros tÃtulos y argumentos han de postergarse. Observar nuestro propio trasiego y peregrinaje torna imprescindible. El dÃa pasado no podÃa con nuevas letras, necesitaba tiempo para procesar mi más Ãntima novela. Me senté junto al rÃo en el primer dÃa de vacación, pero era incapaz de abrir un libro. HabÃa tantas experiencia que leer dentro, tanto por recapitular, por repasar en lo acontecido en este intenso verano, que no me podÃa sumir en ninguna historia ajena. DebÃa extraer primero las enseñanzas aún no descifradas de lo propio vivido en el Foro (www.foroespiritual.org), campamento y peregrinación (www.aroa.eus). Tan aleccionador, tan rico en vivencias y enseñanzas ha resultado todo. --------------------- REUBICARNOS No podemos permanecer mucho tiempo al margen del intenso discurrir de la humanidad en nuestros dÃas... Arriada la mochila, arrinconado el bordón, ahora toca caminar con el pensamiento junto a quienes más padecen esta hora. Ahora es el momento de seguir caminando sin ampollas en los pies, sin dolor en las rodillas, pero con nuestra mente volcada en la humanidad que sufre, también en la que despierta y poco a poco se libera. Ya nos hemos puesto al dÃa. Ya estamos de nuevo mÃnimamente ubicados. Sólo tres breves pinceladas... Ya sabemos que hoy es un dÃa grande y a la vez muy difÃcil para Chile. Deseamos con toda nuestra alma que triunfe la nueva Constitución que podrÃa consagrar al paÃs querido en la vanguardia, no sólo de América, sino de la entera humanidad. ¿Estará su ciudadanÃa a la altura de lo que su avanzadilla en lo social, lo polÃtico, la cuestión de la mujer, la ecologÃa... ha redactado? Ya he repasado la biografÃa de un Gorvachov recién partido. Ya he constatado lo injusto que pueden llegar a ser los pueblos con los lÃderes que quieren llevarlos a mejores puertos. Ya he comprobado que las grandes transformaciones sociales y polÃticas tienen un coste elevado en forma de incomprensión y arrinconamiento. Ucrania está donde la dejamos al comienzo de este verano, sumida en una guerra sin aparente fecha de caducidad. Revelada su valentÃa y determinación, mostrado ante el mundo su arrojo y capacidad de sacrificio, manifestada la fuerza de una nación ante una invasión cruel e injusta, quizás es llegada la hora de ubicar en un pronto futuro una mesa de negociación. Un territorio limitado bien se puede trocar por una garantÃa de paz y de no invasión en el futuro. Ya sé que tendremos que bajar la rueda de la calefacción este invierno, que apretarnos el cinturón ante una cuesta de Enero que empieza ya en Septiembre. Nada comparado con quienes más sufrirán la crisis. La privación y el dolor traigan su debida recompensa de luz y de amor. |
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